“Viviendo como un Yogi Moderno”
¿Quién soy yo?
¿De dónde vengo?
¿Hacia dónde voy?
¿Cuál es mi propósito?
Me gustaría comenzar por contarte lo que esta experiencia no es.
No es un retiro habitual. No es un campo militar ni de entrenamiento. No son unas vacaciones sin compromiso. Tampoco encontrarás en mí o en nadie las respuestas que buscas, incluso las respuestas que no sabes que estás buscando.
Estas preguntas iniciales llevan realizándose por el ser humano desde hace miles de años. Y aún todavía, las seguimos haciendo. Nuestro nivel de consciencia ha evolucionado, o eso dicen, y esto nos ofrece dos caminos: El de la duda, curiosidad y seguir descubriendo; O el de aceptación, ceguera y aturdimiento.
Mi objetivo es que sean cuáles sean o qué formato tenga tus preguntas, puedas encontrar un espacio dónde permitirte simplemente Estar y Ser, a través del uso de herramientas que nos ayudan a florecer y a admitir que las respuestas sólo se hayan dentro de nosotros, y que tal vez hay que aceptar que hay preguntas que de momento no tienen respuesta. Y cómo vivir y estar bien con ello.
Antes de continuar, pregúntate:
¿Qué es lo que más valoro cuando voy a decidir dónde pasar días que tengo libres?
¿Qué es lo que más valoro cuándo voy a decidir con qué profesor estudiar y profundizar mi práctica y experiencia Yogi?
La experiencia que te presento, te aviso, puede cambiar tu vida, así que asegúrate de que antes de venir estás preparada/0 y abierta/0 a vivir de otro modo.
Voy a compartir contigo mi secreto más íntimo, el de cómo vivir cada día, el de hacer amor a la vida en cada momento.
Además de contártelo por primera vez te ofrezco la oportunidad de vivirlo en primera persona conmigo.
Despertar antes de que salga el sol casi cada día, y sentarte en silencio durante unos minutos.
Tal vez, realizar tu pranayama si es que ya estás en ese estadio de tu práctica o Kriyas como Udiyana Bandha. En un ambiente de silencio, respeto y energía.
Tras ello, comenzar con tu auto-práctica guiada personalmente por dos profesores expertos en la materia, pero sobre todo con mucho amor, experiencia propia, conocimiento y compasión.
Al terminar tu práctica, no sentir la urgencia o prisa de hacer nada, sentarte de nuevo unos minutos a meditar dejando que todos los beneficios de la práctica de Yoga se integren. Además, durante la meditación tenemos la oportunidad de que tras haber dedicado tiempo a nuestro ser, a nutrirnos, se extrapole a la gratitud y así poder realmente irradiar lo que cultivas en ti hacia otros seres.
Sabiendo que no hay nada qué hacer o ningún lugar al que ir más que el presente momento, un merecido Brunch llega tras esta mañana de trabajo y cultivo.
Yo suelo ayunar mínimo entre 12 y 16 horas, y muy de vez en cuando hago ayunos de 24 horas. Te cuento esto no para imponerte una dieta sino para compartir mi experiencia.
Mis comidas principales son dos, y algunos snacks, frutas, o zumos durante el día. No te asustes, habrá comida disponible si tienes hambre o tienes otra forma de funcionar, pero date un voto de confianza y prueba sin juicios, sabiendo que puedes comer más o más a menudo si lo deseas, pero tal vez necesitas menos de lo que crees, tal vez menos cantidad o tal vez menos frecuencia. O ¡tal vez no! Si tienes el periodo o estás en fase premenstrual te animo a que te extra Mimes mucho.
Cómo y qué comemos tiene efectos grandísimos en cómo nos sentimos, y asimismo cómo nos comportamos y actuamos en nuestra vida. En un ambiente más sereno y tranquilo observarás cómo tus necesidades son menores, tu ansiedad, necesidad de comer a cierta velocidad, incluso tus digestiones variarán.
Y si sigues esta rutina durante varios días te ayudará a tomar consciencia y que gradualmente puedas incorporarlo de forma natural en tu vida.
La dieta que seguimos es principalmente Plant based (basada en plantas), aunque me defino más como flexitariana, de esto podemos hablar tú y yo, y de todas las dudas que te surjan. Por otro lado, la cocina tiene influencias Ayurvédicas junto con el conocimiento occidental, todas las comidas están supervisadas por dos nutricionistas, manteniendo un equilibrio perfecto de proteína, carbohidratos y vegetales. Yo te escucho: si eres vegetariano, generalmente sin gluten (como yo), vegano, paleo o cualquier otra situación haremos todo lo posible para que te sientas como en casa, o si cabe, mejor 🙂
Lo qué comemos y cómo lo comemos igualmente ayuda y nos beneficia en nuestra práctica de Asana, pudiendo depurar mejor nuestro sistema digestivo, desbloqueando tensiones y aliviando dolores, incluso los llamados crónicos.
Durante el resto del día, dependiendo del horario de ese día, habrá sesiones desde Filosofía hasta movimiento. Dónde no sólo exploraremos la antigua historia y filosofía India, sino que utilizo recursos de muchas fuentes, experiencias vitales y enseñanzas varias para poner en contexto qué nos sirve de la tradición y qué por evolución y desarrollo tal vez es irrelevante. Siempre abierto a debates, y charlas.
Estudiaremos al mismo tiempo Shastras (escrituras sagradas), leeremos, tendremos deberes, compromiso y la responsabilidad de compartir con el resto, saliendo de nuestra zona de confort y significando otra vía de crecimiento y experimentación.
En otras sesiones desarrollaremos técnica, movimiento y exploración usando nuestro cuerpo tal como si fuera un laboratorio en el que con ciertas condiciones obtienes ciertos resultados.
El lugar que he elegido este año nuevamente me gusta particularmente porque en él se respira mucha paz, un ambiente distendido, en el que las carcajadas abundan pero también los momentos de introspección y silencio.
Además, teniendo el mar tan cerca puedes ir a explorar la costa mediterránea y sumergirte en sus aguas, ya sabes dicen que “el mar todo lo cura”.
Las cenas serán, probablemente, más temprano de lo que acostumbras para poder dar espacio a tu sistema a digerir bien antes de la sesión siguiente al día siguiente. Y tras ello, bien podrás ver una película o documental, o te encontrarás hablando y conectando con una o varias personas, o meditando en la shala, o tal vez tomándote una copa de vino.
No hay reglas, sólo hay un suelo fértil dónde tú decides cuánta agua, abono y nutrientes necesita, de qué tipo y de qué forma.
Cuando decides dar el paso a venir a compartir conmigo antes de todo te envío un formulario lo cual no es sólo para conocerte mejor a nivel de tu práctica, sino de igual modo un motivo y estimulación para exponer ahí afuera cosas que nos perturban aquí dentro.
Sirve como instrumento para el que escribe y se expresa, porque simplemente escribir es terapéutico y saber que te van a leer es una forma de sentirse cuidada/o. Y me sirve a mí para ser más consciente de en qué lugar emocional te encuentras en este momento y serte de más ayuda y provecho.
He realizado muchos retiros, durante varios años, cada uno distinto al otro. Sin embargo, todos tienen en común que hay un sentimiento de unidad en vez de separación, de crecimiento y elevación entre todos, y de penetración en la autenticidad de cada estudiante.
Me desborda de amor el corazón y es lo que me hace continuar compartiendo espacio, tiempo, sabiduría, enseñanzas, con las personas que se deciden, se aventuran, las que tienen profundas preguntas, las curiosas.
Ya que algo que sin lugar a dudas tenemos todos los seres humanos en común es:
Yo quiero ser Feliz
¿Te aventuras?
Un abrazo lleno de amor.
Nita.
Más info sobre esta Experiencia: Pincha Aquí